Tengo que contaros algo maravilloso que me acaba de ocurrir, he encontrado un tesoro. Sí, un tesoro, resulta que he ido a ayudar a mis padres a vaciar el piso de mi tía Charlotte y he encontrado una cápsula del tiempo. Sí, sí, cómo leéis. Resulta que mi tía era profesora, y por lo que me cuentan mis padres fue de las pioneras en innovación educativa (vamos que era una auténtica friki de las que molan).
La cuestión es que he encontrado un montón de papeles muy curiosos. Resulta que no existía test de inteligencias múltiples inicial y por eso los alumnos no se organizaban de acuerdo con las inteligencias menos desarrolladas. Vamos, que estaban todos en la misma clase y tenían que seguir un mismo método. ¿Y se extrañaban de que la tasa de fracaso fuera alta?¡Qué cosas!
También había una especie de agenda con notas de claustros a los que acudía mi tía. Dice que los profesores de un mismo grupo no estaban prácticamente coordinados, y que se solapaban contenidos y otros se quedaban por ver a pesar de la obsesión por acabar el libro (sí, sí, había pocas opciones de trabajar otros contenidos que no estuviesen físicamente presentes). ¿Quiere decir eso que por ejemplo en asignaturas lingüísticas cada una iba por su lado? No entiendo, ¿no es mucho más útil lo que hacemos ahora de estudiar de manera complementaria y trabajar los proyectos de manera colaborativa con las asignaturas de ciencias y artes? Digo yo que los profesores estando en el mismo barco tendrán que remar en la misma dirección...
Esperad, que aún hay más. Plantillas de exámenes, ¡¿plantillas de exámenes?!¿Quiere eso decir que repetían lo mismo una y otra vez? Al parecer lo evaluaban todo, hasta los libros de lectura que encima ponían exámenes para estudiar. Espero que mi tía al menos hiciera algunos de los primeros Booktube, aunque eso ahora parezca muy lejano en su día tuvo que ser la bomba. Menos mal que en eso hemos mejorado muchísimo, la EVALUACIÓN pasa por la EVOLUCIÓN. Ahora sí que importa todo el esfuerzo del curso, porque si hay que jugárselo todo a una carta, bueno mejor dicho a un examen, qué presión, pobres alumnos de 2018...
He decidido que yo también voy a hacer mi cápsula del tiempo porque ahora no os créais que todo es perfecto, aún nos queda muuuuucho por mejorar. Sobre todo el tema de los valores, eso seguimos teniéndolo como asignatura pendiente, y creo que es algo esencial, porque una de las cosas que diferencia la profesión de docente del resto es que trabajan con PERSONAS, y no, no basta con haber nacido ser humano. Bueno ya no os cuento más cosas de las que voy a meter, quiero que sea sorpresa, ya os enteraréis o no...
Ha sido un placer haber compartido todo este tiempo con vosotros, ¡nos leemos #INVTICUA18!
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